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A la mayoría de las personas, comúnmente adultos, les suelen salir las llamadas muelas del juicio que en algunas ocasiones pueden producir grandes molestias que conllevan la extracción de las mismas.

Según la Fundación Dental Española, las muelas del juicio, llamadas también terceros molares, son normalmente 4 muelas que suelen salir entre los 18 y 25 años. Sin embargo es posible tener menos  de 4 o incluso no tener ninguna.

Cuando la muela del juicio no tiene espacio para salir en boca, es  preferible extraerla al objeto de evitar complicaciones. Si no tiene espacio para salir, empujará a los dientes vecinos, habrá dolor durante su erupción. Las caries son más frecuentes en las muelas del juicio al ser más difíciles de limpiar con el  cepillo debido a su posición muy atrás.

La intervención se realiza habitualmente con anestesia local. Es posible que se produzca algún sangrado como después de cualquier extracción. También es posible que aparezca una inflamación o edema en la zona de la intervención. Tu dentista te dirá si tienes que ponerte hielo en esa zona. Asimismo,  tu dentista te prescribirá analgésicos en caso de dolor postoperatorio. No es nada infrecuente que tras la extracción de una muela del juicio (sobre todo  las de abajo) tu dentista tenga que darte unos puntos. Si es así, tendrás que volver  a consulta para quitártelos cuando él te diga.