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El empaste dental es un procedimiento odontológico que tiene como objetivo eliminar una caries del diente afectado.
Para ello, el dentista se encarga de limar la parte dañada de la pieza dental para evitar que se extienda hasta la raíz. Después, este hueco provocado en el diente deberá ser rellenado con un material biocompatible, como el composite, para que el paciente pueda comer y sonreír con normalidad.
 
Se trata de uno de los tratamientos dentales más comunes que existen, y se utiliza, como decimos, para solucionar los problemas derivados de una caries. Su nombre técnico es obturación dental.
 

¿Cómo se realiza un Empaste Dental?

El procedimiento de un empaste, es muy sencillo y común. Además, normalmente no suele llevar mucho tiempo. Por lo general, menos de una hora, aunque todo dependerá del tipo de empaste dental.

Veamos cuáles son los pasos a seguir para llevar a cabo un empaste dental:
 
Anestesia Local
Es básico para evitar que el paciente sufra dolor alguno durante el tratamiento de la caries. Una vez que se aplique la anestesia, la zona donde se haya colocado quedará completamente dormida.
 
Eliminar Caries
El odontólogo se encargará de eliminar la caries con las herramientas especializadas para ello. Posteriormente, limpiará el diente sin dejar ni un resto de la enfermedad. Acto seguido, se hace una cavidad para poder continuar con el trabajo.
 
Colocación del Empaste
Grabado del esmalte con un gel de color azul que es un ácido. Esto sirve para preparar el esmalte.
Colocación del adhesivo que es como una especie de pegamento entre el diente y el empaste de composite. Para que funcione tiene que aplicarse una luz unos 20 segundos.
Colocación del empaste con composite, que es un material de color más parecido al diente. Este debe aplicarse por capas, compactarse y adaptarse muy bien sobre las superficies para que no entren bacterias ni quede frágil. Todas las capas tienen que endurecerse mediante la aplicación de luz unos 20 segundos.
Ajustar la mordida con un papel que marca los dientes. El paciente tiene que notar que muerde igual que antes.
 
Pulido del Empaste
Cuando se hayan realizado todos los pasos y el material de la pieza esté endurecido, es cuando se le da forma al empaste hasta dejarlo perfecto para la mordida. Por tanto, se debe pulir el empaste para que quede liso, realizando pruebas de mordida. De este modo, el resultado será perfecto tanto estético como funcional.
 
 

Materiales Utilizados en Empastes Dentales

Los materiales que se usan para los empastes dentales se pueden dividir en los siguientes:

Resina o Composite

Hoy en día son los más utilizados en las clínicas dentales. Se trata de un material que imita muy bien el color de las piezas dentales, por lo que estéticamente es la mejor opción. Sin embargo, debido al desgaste, este material es menos duradero que los metálicos. Dura alrededor de unos 10 años.

Porcelana
Las incrustaciones de porcelana pueden ser inlays u onlays. Las primeras son pequeñas y se incrustan en la cúspide de los dientes, mientras que las segundas son de mayores dimensiones y cubren una gran parte de la superficie exterior del diente. Los acabados con porcelana son muy estéticos y resistentes.
 
Metálicos o de Amalgamas
Este material está casi en desuso, a pesar de haber sido el principal material utilizado por los dentistas.
 
Antiguamente las amalgamas de plata era el material más utilizado en los empastes, pero el color metálico es antiestético. Además, la composición de éstos puede llevar a reacciones tóxicas. Aun así, todavía vemos pacientes con este tipo de obturaciones, aunque cada vez es un material que se usa menos.
 
Como decimos, la estética no es su punto fuerte. Sin embargo, tienen una garantía aproximada de 30 años.
 

Otros Casos en los que puede ser Necesario un Empaste

Como ya hemos comentado, la situación más habitual para poner un empaste dental u obturación dental es como tratamiento para una caries dental. Sin embargo, las obturaciones dentales, especialmente las resinas, también se pueden utilizar en otro tipo de problemas dentales, como por ejemplo:

Para prevenir las caries, se realiza una restauración superficial que sella surcos y fosas profundas o difíciles de limpiar.
Cuando hay fracturas dentales en las que la estructura dentaria remanente es suficiente para sostener una restauración y no es necesaria la colocación de una funda dental.
En casos de desgaste dental.
Para reducir la sensibilidad dentaria.
Cuando el diente presenta hipoplasia del esmalte (mineralización deficiente del esmalte).
Como tratamiento de apoyo en caso de correcciones estéticas.
 

Algunos Consejos para Evitar Reparaciones Dentales

Aunque los empastes y reconstrucciones son tratamientos muy efectivos para reparar piezas dentales, la prevención es el mejor consejo que un odontólogo puede dar a sus pacientes para evitar poner en práctica estos tratamientos. 
 
Dicho esto, os dejamos algunas recomendaciones para mantener una buena salud bucodental y evitar tratamientos de reparación dental:
Mantener buenos hábitos de higiene y cepillarse los dientes después de cada comida, preferiblemente con pasta dentífrica rica en flúor.
Utilizar el hilo dental y el enjuague bucal después de cada cepillado.
Acudir a la clínica dental cada seis meses y recibir como mínimo una limpieza bucal al año.
Llevar una dieta equilibrada y evitar comidas demasiado azucaradas y bebidas carbonatadas.
 

¿Duelen los Empastes Dentales?

Los empastes dentales son procedimientos mínimamente invasivos de conservación dental, por lo que el paciente no tiene por qué sentir dolor ni molestia alguna durante el procedimiento o posteriormente en casa.

En función de la profundidad de la caries, los odontólogos pueden valorar la posibilidad de dormir la zona con anestesia local. Si la caries ha llegado hasta la dentina, es muy probable que anestesien la zona para evitar que el paciente sienta molestias durante el procedimiento.
 
Una vez pasado el efecto de la anestesia, la pieza dental se sentirá como un diente normal y podrá volver a hacer su función sin producir dolor o sensibilidad dental.
 
En cambio, si el diente no está muy afectado por la caries y solo ha dañado una parte superficial, el especialista seguramente no utilice anestesia para realizar el empaste dental, puesto que no ocasionará molestias ni dolor en el paciente.
 
Lo que sí es cierto, es que en ocasiones, tras haber realizado un empaste dental, el paciente puede tener cierta sensibilidad al comer alimentos muy fríos o calientes o al cepillarse los dientes. Estas molestias pueden durar 3 o 4 días. 
 
No obstante, si aparece algún tipo de dolor o molestia después de colocar el empaste, es posible que se deba a que la caries era demasiado grande y la reconstrucción ha quedado muy cerca del nervio.
Si fuera este el caso, lo más aconsejable es acudir a tu clínica dental de confianza para que el especialista solucione el problema lo antes posible.
 

Recomendaciones después de un Empaste Dental

Como hemos mencionado anteriormente se trata de una intervención bastante sencilla y muy común entre los dentistas. Por lo que no hace falta dar unas recomendaciones muy específicas ni complicadas. No obstante, sí que os dejaremos una serie de pautas a seguir que son las siguientes:

Evitar morderse la lengua o el labio, ya que durante aproximadamente 3 horas, tendrás la zona adormecida debido a la anestesia local.
 
Evitar comer y beber justo después de haber salido de la intervención para la colocación del empaste. Es recomendable esperar un par de horas para conseguir que el empaste se selle adecuadamente y evitar así futuras complicaciones.
 
No fumar. Es recomendable no fumar nunca por salud. Pero una vez realizado el empaste, es aconsejable no hacerlo en un buen tiempo por las manchas que pueden dejar en los dientes.
 
Una vez realizado el empaste, es probable que sientas sensibilidad en la zona durante un período de tiempo, pudiendo llegar a alargarse incluso un mes. Si superase ese tiempo o sintieras mayores molestias, es recomendable visitar a un especialista para explicarle lo que te ocurre y poner solución a tu problema.
 

Contraindicaciones para un Empaste

El empaste dental está contraindicado generalmente en dos casos:
 
Daño en los Dientes Anteriores causado por el Desgaste del Bruxismo
En estos casos, de la misma manera que los dientes se desgastaron por la fricción, las obturaciones sufrirán un deterioro más rápido. Aunque no es una contraindicación estricta, debes tener en cuenta que tal vez tengas que repetir la obturación con más frecuencia.
 
Restauración Demasiado Grande
Cuando la cantidad de estructura dentaria remanente que debe sostener el nuevo empaste es demasiado pequeña, hay un gran riesgo tanto de perder el empaste dental nuevo, como de una fractura dental más grande que impida otro tipo de restauración. En estos casos, es mejor pensar en otro tipo de tratamientos, como pueden ser por ejemplo, las coronas dentales.
 

Consejo Final:

Debes tener en cuenta que aunque hay una duración media del empaste dental más o menos determinada, ésta dependerá especialmente de tus hábitos de salud bucodental. Recuerda hacerte revisiones periódicas con tu dentista para que detecte algún tipo de deterioro y pueda corregirlo a tiempo.
 
En el caso de las resinas especialmente, una buena higiene oral y la calidad de los alimentos que consumas, pueden ayudar a mantener un color adecuado.
 
No olvides que no sólo se realizan empastes por caries. Pues este tipo de tratamiento, también se suele realizar cuando existen fracturas, como prevención en determinadas situaciones, o incluso, en algunas consideraciones estéticas. 
 
El tipo de empaste dental que debes realizarte dependerá entre otras cosas del tamaño, la localización y en menor medida, del costo del tratamiento.